Contenidos
Como saber la vida laboral de una persona
Crisis de identidad profesional
Difundir el amormásAntes de renunciar a su sueño de equilibrio de la vida laboral, aclare las razones por las que el equilibrio de la vida laboral es importante. Porque entender por qué es importante el equilibrio de la vida laboral no sólo es bueno saberlo, sino que es necesario para crear una vida equilibrada.
Y la necesidad de equilibrar la vida laboral es más importante que nunca. Especialmente teniendo en cuenta el entorno laboral imprevisible y a menudo bajo presión y la difuminación añadida de las líneas entre el trabajo y lo personal (especialmente desde que muchos de nosotros trabajamos más desde casa).
Y antes de seguir adelante, asegúrese de obtener su copia de mi guía gratuita que contiene 8 estrategias probadas de gestión del estrés y de la mentalidad para una mente tranquila y resistente. Descargue su guía gratuita >>> aquí.
Cuando pensamos en lo que significa el equilibrio entre la vida laboral y la personal, la mayoría de nosotros nos imaginamos igualando un balancín (con el trabajo en un lado y el resto de tu vida en el otro). Y pensamos que debemos igualar ambos lados, centrándonos en la cantidad de tiempo que pasamos en cada lado del balancín.
Vida laboral media en años
Muchas personas tienen «poco tiempo», y se apresuran constantemente a hacer malabarismos con diferentes compromisos. Y los australianos trabajan mucho: más de uno de cada diez empleados trabaja más de 50 horas a la semana, lo que la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos) considera «jornadas muy largas».
Un buen equilibrio entre trabajo y vida privada significa que hay armonía entre los distintos aspectos de la vida. Los beneficios obtenidos en cada una de las áreas son capaces de apoyar y fortalecer las otras. Muchas personas están aprendiendo a combinar con éxito su trabajo y su vida personal (integración de la vida laboral y personal).
Los australianos trabajan más horas que la mayoría de los habitantes de otros países desarrollados de la OCDE, con menos tiempo para cuidar de sí mismos. Trabajar muchas horas puede afectar a la salud, aumentar el estrés y reducir las actividades de ocio.
Al mismo tiempo, cada vez hay más personas que trabajan a tiempo parcial, con salarios bajos y en empleos inseguros, lo que también puede significar trabajar en horarios no sociales. Los horarios flexibles y el trabajo desde casa pueden ser útiles, sobre todo si se tiene familia. Pero puede dificultar la conciliación de la vida laboral y familiar, ya que no hay separación entre el trabajo y el hogar.
El trabajo está consumiendo mi vida
«Sólo podemos cambiar [las normas] si tenemos políticas colectivas que se apliquen a todo el mundo y con las que todos estemos de acuerdo y que la gente utilice. Y así es como empiezan a cambiar las normas. Hoy nadie diría: ‘cómo te atreves a coger el seguro de desempleo'», dice Gerson. «Cuando no tenemos políticas nacionales, se penaliza a los empresarios que lo intentan, porque entonces compiten con empresarios que no están sujetos a las mismas reglas. Tiene que haber igualdad de condiciones para las organizaciones, igual que tiene que haber igualdad de condiciones para los trabajadores.»
La vida laboral cotidiana
Con tantos de nosotros divididos entre una gran carga de trabajo, la gestión de las relaciones y las responsabilidades familiares, y la inclusión de intereses externos, no es de extrañar que más de uno de cada cuatro estadounidenses se describa a sí mismo como «súper estresado». Y eso no es equilibrado ni saludable.
En nuestra prisa por «tenerlo todo hecho» en la oficina y en casa, es fácil olvidar que cuando nuestros niveles de estrés aumentan, nuestra productividad cae en picado. El estrés puede acabar con nuestra concentración, volvernos irritables o deprimidos y perjudicar nuestras relaciones personales y profesionales.
Con el tiempo, el estrés también debilita nuestro sistema inmunológico y nos hace susceptibles a una serie de dolencias, desde resfriados hasta dolores de espalda y enfermedades del corazón. Las investigaciones más recientes muestran que el estrés crónico puede duplicar el riesgo de sufrir un ataque al corazón. Esta estadística es suficiente para elevar la presión arterial.
Aunque todos necesitamos una cierta cantidad de estrés para estimularnos y ayudarnos a rendir al máximo, la clave para gestionar el estrés reside en esa palabra mágica: equilibrio. Lograr un equilibrio saludable entre el trabajo y la vida privada no sólo es un objetivo alcanzable, sino que tanto los trabajadores como las empresas ven las recompensas. Cuando los trabajadores están equilibrados y contentos, son más productivos, cogen menos días de baja y es más probable que permanezcan en sus puestos de trabajo.