Elena Espinosa alerta de los «problemas de seguridad alimentaria» derivados del cultivo de droga en América Latina

La Ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Elena Espinosa, aseguró esta tarde que el cultivo ilegal de drogas contribuye a provocar «problemas de seguridad alimentaria» y de abastecimiento en países de América Latina y El Caribe. Además, estas plantaciones, dijo, también constituyen una amenaza para la biodiversidad de las zonas y para el medio rural.

Así lo explicó la ministra durante el acto de clausura de la Cumbre de alcaldes, alcaldesas y ciudades sobre drogas de Europa, América Latina y El Caribe, en el que, desde el miércoles, participaron más de 200 personas de 40 ciudades de 34 países.

En este sentido, Espinosa señaló en su intervención que existen acuerdos entre la Unión Europea y países latinoamericanos y caribeños con el fin de promover cultivos alternativos escogidos por la población local que sirvan de sustento alimentario y, al mismo tiempo, constituyan una alternativa económica y medioambientalmente sostenible a la plantación de droga.

La Ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino aseguró asimismo que el problema de las drogas «es global» y que, como tal, debe ser analizado y tratado con medidas y respuestas globales e «integrales». En la misma línea, hizo referencia al Plan Nacional sobre Drogas de España, con el cual se pretende sumar los esfuerzos de todos los ciudadanos en la lucha contra las drogas.

ALIANZA DE CIUDADES

Al margen del ámbito estatal, Espinosa señaló el interés que el Gobierno español ha puesto en el proyecto de la Alianza de Ciudades en Tratamiento de Drogas y se refirió a algunos de los proyectos que la Unión Europea, también participante de la cumbre, está llevando a cabo en esta materia.

Elena Espinosa se mostró orgullosa del trabajo que los municipios están llevando a cabo en materia de drogas, ya que «tienen un papel protagonista que no se debe olvidar». La ministra dijo también esperar que esta cumbre haya servido para conseguir una «red de alianzas que contribuyan en la lucha contra el tráfico de drogas.»

Por su parte, el alcalde de Lugo, Xosé López Orozco, propuso a Elena Espinosa como embajadora de esta cumbre en nombre del Gobierno de España y aprovechó para asegurar que es necesario continuar con la lucha contra los narcotraficantes, al tiempo que emplazó a todos los presentes a la siguiente cumbre, que se celebrará en Coimbra, Portugal, en el mes de septiembre.

UNA DISCUSIÓN DE GRAN ALTURA

El representante del Banco Interamericano de Desarrollo, Gustavo Béliz, elogió el papel de la cumbre, que definió como «una discusión de gran altura y con una muy buena agenda». Además, aprovechó para hacer un llamamiento a la acción activa en la problemática de la drogadicción y dijo que estas cumbres tienen asegurado el apoyo y la participación del Banco Interamericano de Desarrollo.

Finalmente, el Secretario de Seguridad Multidimensional de la Organización de los Estados Americanos, Alexandre Addor-Neto, aseguró que a pesar de las posibles divergencias, la cumbre de Lugo se ha convertido en un nuevo punto de partida gracias a una visión integral de la problemática de las drogas.

Addor-Neto destacó lo interesante de nuevas propuestas de uso de los tribunales para evitar la encarcelación como alternativa a la drogodependencia, que fueron expuestas a lo largo de estas jornadas y aprovechó para repetir que «lo importante es coordinar una política global con intereses locales» que favorezcan a los ciudadanos.

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