Tratado de no proliferación nuclear

Temas del tratado de no proliferación nuclear

En virtud del tratado, los Estados no poseedores de armas nucleares, incluida Nueva Zelanda, acordaron no adquirir nunca armas nucleares. A cambio, los Estados con armas nucleares (China, Francia, Rusia, Reino Unido y Estados Unidos) aceptaron eliminar sus armas nucleares y afirmaron el derecho de todos los Estados a la tecnología nuclear con fines pacíficos. El Organismo Internacional de la Energía Atómica contribuye a garantizar a la comunidad internacional que la tecnología nuclear no se utiliza para desarrollar armas nucleares.Nueva Zelanda fue uno de los primeros signatarios del TNP, que entró en vigor en 1970. En la actualidad, 190 países son Estados parte del tratado. Sólo India, Israel, Pakistán y Sudán del Sur no se han adherido al TNP (Corea del Norte anunció su retirada en 2003). Seguimos animando a estos países a que se adhieran al Tratado como Estados no poseedores de armas nucleares y a que sometan todas sus instalaciones nucleares a las salvaguardias del Organismo Internacional de la Energía Atómica.Más información sobre el Organismo Internacional de la Energía Atómica¿Qué se ha acordado? Se suele decir que el TNP tiene tres pilares:

Tratado de no proliferación de armas nucleares

El Tratado sobre la No Proliferación de las Armas Nucleares, comúnmente conocido como Tratado de No Proliferación o TNP, es un tratado internacional cuyo objetivo es evitar la propagación de las armas nucleares y de la tecnología armamentística, promover la cooperación en los usos pacíficos de la energía nuclear y fomentar el objetivo de lograr el desarme nuclear y el desarme general y completo[3] Entre 1965 y 1968, el tratado fue negociado por el Comité de Desarme de las Dieciocho Naciones, una organización patrocinada por las Naciones Unidas con sede en Ginebra, Suiza.

El tratado define a los estados con armas nucleares como aquellos que han construido y probado un dispositivo explosivo nuclear antes del 1 de enero de 1967; estos son Estados Unidos, Rusia, el Reino Unido, Francia y China. Se sabe o se cree que otros cuatro estados poseen armas nucleares: India, Pakistán y Corea del Norte han probado y declarado abiertamente que poseen armas nucleares, mientras que Israel es deliberadamente ambiguo en cuanto a su estatus de armas nucleares.

Wikipedia

El Grupo de Suministradores Nucleares (GSN) es un régimen multilateral de control de las exportaciones y un grupo de países suministradores de material nuclear que tratan de evitar la proliferación nuclear mediante el control de la exportación de materiales, equipos y tecnología que puedan utilizarse para fabricar armas nucleares[1].

Este artículo necesita citas adicionales para su verificación. Por favor, ayude a mejorar este artículo añadiendo citas de fuentes fiables. El material sin fuente puede ser cuestionado y eliminado.Buscar fuentes:  «Grupo de Suministradores Nucleares» – noticias – periódicos – libros – erudito – JSTOR (junio de 2016) (Aprende cómo y cuándo eliminar este mensaje de la plantilla)

El GSN se fundó en respuesta a la prueba nuclear india de mayo de 1974[2] y se reunió por primera vez en noviembre de 1975. La prueba demostró que cierta tecnología nuclear no relacionada con las armas podía convertirse fácilmente en desarrollo armamentístico. Las naciones que ya habían firmado el Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP) vieron la necesidad de limitar aún más la exportación de equipos, materiales o tecnología nucleares. Otra ventaja era que se podía incorporar a las naciones no signatarias del TNP y no pertenecientes al Comité de Zangger, en concreto a Francia.

Tratado de no proliferación

Estamos a un año del 50º aniversario del Tratado de No Proliferación, la piedra angular del régimen mundial de desarme y no proliferación nuclear. El tratado ha tenido un éxito indiscutible en la prevención de la propagación de las armas nucleares, sentando las bases para una reducción significativa de los arsenales nucleares y facilitando el uso de la energía nuclear con fines pacíficos. También ha establecido un sistema internacional de salvaguardias y ha fomentado la creación de zonas libres de armas nucleares. A pesar de estos éxitos, el papel de las armas nucleares ha aumentado recientemente en un contexto de deterioro del entorno de seguridad internacional.

Se están desarrollando capacidades cualitativamente nuevas, estimuladas por la nueva tecnología. La tendencia gradual a la baja del arsenal nuclear mundial, desde su máximo en 1986, no debería invertirse. Debe evitarse una posible carrera armamentística nuclear, que no beneficiaría a nadie.

Los desafíos de la proliferación regional añaden más complejidad al estado de las cosas. Nuestro firme objetivo sigue siendo la desnuclearización de la RPDC de forma completa, verificable e irreversible, de acuerdo con todas las resoluciones pertinentes del CSNU. Mientras tanto, el acuerdo nuclear con Irán (JCPOA), respaldado multilateralmente y que constituye un logro clave del régimen mundial de no proliferación, se encuentra en una situación precaria.